El próximo 14 de noviembre se publicará 'The Best of Everything but the Girl', el nuevo recopilatorio de éxitos del dúo de Ben Waths y Tracey Thorn, una de las grandes formaciones del pop más pegadizo y elegante del Reino Unido. El nuevo álbum contendrá 16 canciones fundamentales en su historia, quedándose realmente corto para la colección tan maravillosa de gemas pop que Everything but the girl han ido lanzando desde que debutaran allá por el lejano 1982, año en el que lanzaron su primer EP que se hizo muy popular gracias su particular versión de la samba de Cole Porter 'Night and day'. Dos años después publicarían su puesta en largo 'Eden', donde siguieron investigando con la bossa nova y las sonoridades jazz en aquella nueva ola llamada sophisti-pop junto a Sade, Carmel, Simply Red, Spandau Ballet o The Blue Nile. Durante varios años siguieron por esa senda del pop sedoso y preciosista, protagonizado por la brillante voz de Tracey, entregando maravillas como 'When All's well', 'Rollercoaster', 'Driving', 'I don't want to takl about it' o la excelente versión del tema de Simon & Garfunkel 'The only living boy in New York'. Pero habría que esperar a 1994 cuando el mundo del dúo cambió radicalmente con la publicación del remix de 'Missing' por el rey del house Todd Terry que se convirtió en uno de los mayores éxitos de la historia del pop y transformó su sonido hacia la pista de baile con una gran aceptación, hasta el día de hoy. Curiosamente, lo que se consideró una cambio radical a finales del siglo pasado, ha acabado asumido gracias al triunfo del house en las listas pop.